Entre el poliestireno y el polipropileno se comen el pastel, el resto de materiales es pura anécdota o decoración. Pero como veremos, aún existen algunas posibilidades para romper con la monotonía. Al polipropileno no se le resiten ni las marcas blancas ni las referencias de primer precio, la razón está en el coste unitario y en la productividad de las envasadoras.
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También la última novedad en envases se moldea en este material, la competencia arrecía y ni siquiera innovando se puede bajar la guardia con el precio.
Por cierto, uno de estos días tengo que hacer un post exclusivo de los envases de Activia, es impresionante la de formatos que tiene o ha tenido en tan poco tiempo.
Pero volviendo al tema que nos ocupa. El problema de las termoformadoras es la inversiones inicial y consecuentemente las tiradas mínimas, que limitan la aparición de nuevos operadores. Aunque el colmo de esta limitación la encontramos en el envasado aséptico de los yogures pasteurizados después de la fermentación.
Pero si tenemos las ideas claras existen otras vías, el problema es que con envases preformados vamos a perder competitividad, con lo que tenemos que sorprender a nuestros clientes con productos diferenciados.
Pero si tenemos las ideas claras existen otras vías, el problema es que con envases preformados vamos a perder competitividad, con lo que tenemos que sorprender a nuestros clientes con productos diferenciados.
Hay alternativas, para todos los gustos:
Calidad bio.
Con concepto étnico escandinavo (diseño incluido).
Pasando por el clasicismo griego
Hasta lo rustico-oriental.
También en vidrio pero más "industrial" (este yogur de oveja es impresionante).
O en el tarrito de la abuela..
Cambiando de material y para los que añoran el pasado: el tradicional envases de cartón parafinado.
Y en el extremo opuesto, los envases bicapa -polímero y cartulina perimetral desmontable- duplican la superficie del mensaje y facilitan el reciclado (el envase es muy interesante y el producto envicía).
También podemos jugar con las formas
O ponerlo en copa; este "yogurt" debe estar muy bueno, sino no se explica.
O ponerlo en copa; este "yogurt" debe estar muy bueno, sino no se explica.
También nos podemos diferenciar con los tamaños, ¡que siempre nos olvidamos del sector profesional!.
O mezclado que no batido.
Y ya puestos: mézclelo usted mismo. En el propio envase.
En el corner.
O de sombrero.
Ya para acabar, no todo es innovar con el envase. Como hemos visto, Activia nos facilita consumir hasta la última cucharada redondeando su base, objetivo que también se puede lograr a través de esta singular cuchara.
O espachurrándolo sin contemplaciones.
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